El ‘Cantante de los Cantantes’, el gran Héctor Lavoe, nació el 30 de septiembre
de 1946 en Machuelo de Ponce, Puerto Rico. A los tres años perdió a su madre,
un hecho que marcó para siempre su vida. De chico su padre le exigió ir a la
escuela musical de Juan Morel Campos. Allí, además de aprender a tocar el
saxofón, conoció a Papo Lucca y José Flebes.
A los 16 años se mudó a Nueva York y rápidamente formó parte de varios
grupos como la Orquesta de Roberto García, la Orquesta de Nueva York y Kako y
su Combo. Pero fue en 1967 cuando Héctor se convirtió en el vocalista principal
de la Orquesta de Willie Colón. Con esa banda grabó grandes discos, entre 1967
y 1973, como El malo, The hustler, La gran fuga y Cosa nuestra,
así como dos volúmenes de Asalto navideño.
Clásicos de la salsa como “Juana Peña”, “Barrunto”, “Calle Luna, Calle
Sol”, “Che che Colé”, “Aires de Navidad”, “El día de mi suerte”, “Todo tiene su
final” y “La murga de Panamá” son de esta etapa de su carrera musical. El dueto
formado con Colón fue llamado ‘The bad boys’ (‘Los chicos malos’), debido al
estilo callejero y desafiante que imprimieron al estilo musical y las letras de
sus canciones, muy distintos al ‘boogaloo’ o la ‘pachanga’.
Fue también por esta época en que Héctor Lavoe tuvo sus primeros
encuentros con la vida desordenada, volviéndose adicto a las drogas y a los
excesos. Tras seis años al lado de Willie Colón, éste decidió no trabajar más
con él sobre el escenario, aunque continuaron siendo muy buenos amigos y
trabajando en los estudios de grabación. Cabe destacar que a partir de 1968 se
convirtió en vocalista de la Fania All Stars.
En 1975 Héctor Lavoe inició su carrera como solista. De esta etapa se
recuerdan sus exitosos temas “Bandolera”, de autoría de Willie Colón; “Periódico
de ayer” de Tite Curet Alonso; así como “El cantante”, compuesto por Rubén Blades. Precisamente este tema le valió el apodo de ‘El Cantante de los
Cantantes’. Otras canciones recordadas de esta etapa son “Mi gente” y “El
todopoderoso”.
A partir de 1980 lanza varios LP, de los cuales se recuerdan hasta hoy
salsas como “Aléjate de mí”, “Juanito Alimaña”, “Triste y vacía”, “La fama” y “Déjala
que siga”. En tanto, junto con la Fania All Stars graba “El rey de la
puntualidad”.
Tras un corto periodo de rehabilitación, Héctor Lavoe vivió en carne
propia desgracia tras desgracia. En mayo de 1987 su hijo Héctor Luis muere
accidentalmente de un disparo. Ese mismo año su suegra es asesinada y fallece
su padre. Poco después le detectaron el virus del VIH. Todo esto afectó su
salud física y mental.
Es así que en 1988, tras la cancelación de un concierto en Puerto Rico,
la depresión le ganó la pulseada y decidió acabar con su vida. Se lanzó del
noveno piso de un hotel, pero milagrosamente sobrevivió. Su último álbum fue Héctor Lavoe & Van Lester: the master
and the protege.
Sus últimos años los pasó en Nueva York, donde efectuaba ocasionales
presentaciones. Su estado de salud se fue agravando y el 29 de junio de 1993
fallece en el Memorial Hospital de Queens. Sus restos fueron enterrados en el
cementerio Saint Raymon de Queens y nueve años después, tal como lo pidiera en
vida, trasladados a su natal Ponce.
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